Los aceites esenciales son ingredientes fundamentales para la creación de las fragancias y los sabores. Tienen una larga tradición en nuestro país, donde su cultivo genera un valor de 34,5 millones de euros y más de 25.000 empleos indirectos.
Actualmente, los aceites esenciales se enfrentan a una nueva clasificación de ingredientes, propuesta por la Unión Europea dentro de la Estrategia de Sostenibilidad de Sustancias Químicas (CSS, Chemicals Strategy for Sustainability), que modifica su catalogación, pasando de ser calificados como sustancias complejas a ser considerados mezclas de sustancias químicas. Algunos de ellos, al contener componentes que se podrían considerar peligrosos, definirían un peligro en el propio aceite esencial sin existir una justificación científica habiendo un dossier y estudios sobre el propio aceite esencial demostrando su no peligrosidad. Por este motivo, AEFAA (Asociación Española de Fragancias y Aromas Alimentarios) se ha sumado a la Plataforma para la Defensa de los Aceites Esenciales en España, de la que son integrantes Stanpa (Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética), AILIMPO (Asociación Interprofesional de Limón y Pomelo), AMAF (Asociación Mediterránea de Aromas y Fragancias), ANIPAM (Asociación Nacional Interprofesional de Plantas Aromáticas y Medicinales) y EFEO (Federación Europea de Aceites Esenciales), que reivindica que los aceites esenciales se sigan considerando como sustancias naturales complejas (NCS, Natural Complex Substances), y no como mezclas de componentes (MOCS, More Than One Component).
Defensa de los Aceites Esenciales en España, un cultivo de referencia a nivel mundial
La Plataforma de Defensa de los Aceites Esenciales en España pretende dar voz a los agricultores y productores de esencias, así como a los fabricantes de esencias y aceites esenciales y de fragancias y perfumes.
España es un referente a nivel mundial en la producción de aceites esenciales como limón, lavanda, lavandín, jara, espliego y salvia.
El cultivo de aceites esenciales en España asciende a más de 72.000 hectáreas, con una producción anual de más 1.300 toneladas, generando unos ingresos de 34,5 millones de euros y más de 25.000 empleos indirectos.
Con la modificación propuesta en el nuevo reglamento CLP (Classification, Labelling, Packaging, Clasificación, Etiquetado, Envasado), el sector ve amenazada su actividad, ya que su demanda puede verse reducida drásticamente, al tiempo que los nuevos procesos requeridos para la evaluación y reetiquetado de los productos conllevarían un alto coste asociado a la producción de los aceites esenciales.
Por una parte, el consumidor puede entender erróneamente que los aceites esenciales entrañan algún riesgo para su salud, ya que se debería notificar en un nuevo etiquetado que el aceite esencial podría presentar nuevos riesgos para la salud o el medioambiente. Por otra parte, al ser considerados sustancias compuestas por más de un componente, los estudios de seguridad de los aceites esenciales deberán realizarse de manera individual sobre cada sustancia que lo compone, y no en su conjunto, mediante el registro de dosier REACH del aceite esencial y teniendo en cuenta todos los ensayos y literatura científica que se manejan desde hace años.
¿Qué son los aceites esenciales?
Los aceites esenciales son compuestos aromáticos volátiles que se obtienen mediante mecanismos físicos entre ellos la destilación a vapor de plantas aromáticas. Se trata de sustancias naturales complejas, puesto que están compuestas por varias moléculas que se originan de manera natural en las plantas. Todas las moléculas que los componen son naturales y no contienen ningún añadido químico.
Como decíamos anteriormente, las regulaciones europeas actuales consideran que los aceites esenciales son sustancias químicas, conocidas como Sustancias Naturales Complejas (NCS). Se incluyen en el ámbito de aplicación de las nuevas medidas reglamentarias y se están viendo afectados por la CSS (Chemicals Strategy for Sustainability, Estrategia de Productos Químicos para la Sostenibilidad).
Los aceites esenciales son sustancias naturales complejas
La posición de la Plataforma de Defensa de los Aceites Esenciales en España es que los aceites esenciales deben seguir considerándose como sustancias naturales complejas y no como mezclas de componentes (MOCS), ya que esta clasificación podría generar dificultades a la hora de su comercialización por un peligro no evaluado si se calcula su peligrosidad solamente por su composición y sin tener en cuenta los ensayos científicos del propio aceite en su dossier REACH.
Los aceites esenciales son seguros
Los aceites esenciales están sujetos a estrictas evaluaciones de seguridad que garantizan los más altos estándares de calidad a los consumidores.
La inquietud del sector sobre la propuesta regulatoria europea se basa en que los aceites esenciales ya no se considerarían NCS (sustancias naturales complejas) y se definirán como MOCS (sustancias con más de un componente). Esto modificaría su categorización, que ya no se basaría en la evaluación y en estudios del aceite esencial según los registros REACH realizados en los últimos 10 años, sino en el cálculo basado en la composición de cada uno de sus componentes sin tener en cuenta el dossier del registro REACH.
Aunque estas iniciativas propuestas por la Comisión Europea no están diseñadas para regular específicamente los aceites esenciales, desde el punto de vista de la Plataforma para la Defensa de los Aceites Esenciales en España se corre el riesgo de que se vean afectados negativamente por estas nuevas disposiciones, a pesar de que su uso seguro ha sido demostrado desde hace décadas en productos de consumo y con múltiples informes de registro REACH que así lo atestiguan.
El cambio de reglamentación implicaría además una alarma injustificada de cara al consumidor, posibles evaluaciones de seguridad y de información adicionales que afectarían sobre todo a las pequeñas y medianas empresas, muchas de las cuales no podrían asumir el impacto y los costes añadidos, así como el reetiquetado de los productos que contengan aceites esenciales.
Desde AEFAA defendemos una industria comprometida con la seguridad y la sostenibilidad. Ofrecemos apoyo a nuestros asociados para crecer innovando y sentando las bases de un sector sólido y responsable.
